Su hijo don Antonio Centeno fue corregidor de Trujillo, en el Perú.
Participó en la jornada del Brasil en el sitio de Salvador (Bahía).
Posteriormente pasó a Flandes y participó en la batalla de Nordlingen.
Tomó posesión del cargo a fines de ese año.
En mayo de 1649, Chaves y Mendoza dirigió un informe al rey sobre la provincia de Costa Rica muy desfavorable para sus habitantes, con excepción del portugués Luis Machado y el castellano Fernando de Carrión Villasante, a los cuales dedicó efusivos elogios.