[7] La hija pequeña debió de morir en Sevilla a tierna edad, ya que no hay registros documentales que la sitúen en Madrid.
[15][16] Santa Justa y Santa Rufina, son otros cuadros en los que Juana Pacheco pudo haber servido de modelo a su padre.
[19] Posiblemente fue enterrada junto a su esposo en la Iglesia de San Juan Bautista, desapareciendo ambas tumbas con la demolición de la iglesia en 1811.
En 1852, el escritor y dramaturgo español, Ildefonso Antonio Bermejo, escribió el drama en tres actos para teatro, Una llave y un sombrero, cuyos personajes son Juana Pacheco, Velázquez, Felipe IV y Bartolomé Murillo,[20] que se representó ese mismo año en el Teatro del Príncipe de Madrid.
[21] En 2016 se dedicó una exposición a Francisco Pacheco, en la que se expusieron las obras Santa Justa y Santa Rufina.