Juana de Arco (título original: Joan of Arc) es un telefilme canadiense dirigido por Christian Duguay y protagonizado por Lelee Sobieski.
Un día, también de niña, ella empieza a ver visiones en la iglesia y el cura del lugar Jean le Maistre, impresionado por la devoción que muestra, le empieza a enseñar sobre la guerra y cómo el rey inglés y el rey francés luchan por el trono de Francia, una lucha desatatada por una reina francesa que repudió a su hijo y dio a su hija al rey de Inglaterra como esposa y que, según una profecía, solo una virgen puede acabarla.
Motivada por esas visiones cada vez más intensas y por la muerte de un amigo suyo a causa de la guerra y además con el beneplácito del cura a quien se lo ha contado todo, ella entonces va a Chinon para ayudar al delfín Carlos.
Después Juana es llevada por ellos a Ruan, donde es juzgada por un tribunal dirigido por Pierre Cauchon, ex consejero de Carlos, que la ve como amenaza por autoproclamarse como la virgen de esa profecía y luego, por no renunciar a sus creencias, condenada en 1431 a la hoguera y quemada en público.
Más tarde la condena contra ella es anulada y 500 años después es canonizada.