Julio Saldaña

Era un jugador polifuncional, que originalmente se destacó como marcador de punta derecho, pero por su despliegue y vocación ofensiva rápidamente se convirtió en una alternativa para ocupar la banda derecha del mediocampo.

Su destacada labor en todos los campeonatos logrados por el equipo rosarino le significaron que se fuera transferido a Boca Juniors, al que llegó a mediados de 1993, debutando oficialmente el 12 de septiembre por la primera fecha del Apertura ante Estudiantes en La Bombonera (0-0).

Tuvo una grave lesión, rompiéndose los ligamentos en mayo de 1994 al encontrase con Robert Prosinečki en la final contra el Real Madrid por la Copa Iberoamericana.

En total jugó 61 partidos oficiales y marcó 3 goles, de los cuales el más recordado se lo hizo a River Plate en el Monumental, parte de la goleada 4-2 por el Clausura 1995.

Esta segunda etapa concluyó en el 2002, cuando Larry decidió ponerle fin a su carrera como futbolista, en ese año siendo dirigido por un excompañero suyo, Julio Zamora.