En 1798, en el avance de los atamanes desde el Dniéper al Kubán, el pueblo fue asignado a las tierras de los cosacos del Mar Negro.
Al año siguiente habitaban la localidad 1 048 personas.
A finales del siglo XIX se habían establecido 4 835 habitantes y había tres escuelas y varios establecimientos de pequeña industria.
En 2007 se produjo un incendio en una residencia geriátrica en el que murieron 62 ancianos.
[2] La población se halla en un lugar de importancia turística debido a sus playas naturales.