Korat

[1]​ En 1959 se envió el primer ejemplar a Oregón, Estados Unidos y en 1966 es reconocido por la Cat Fanciers Association.

[3]​ El korat es una raza completamente natural, es decir, no intervino la acción humana en su crianza.

• Orejas: Impresionantemente largas, punteadas, anchas en la base, continuando con las líneas de la cuña.

Los korat suelen ser muy afectuosos con sus amos pero un poco ariscos con extraños y niños.

Son muy inteligentes y les gusta estar rodeados de personas si crecen en un ambiente doméstico tranquilo.

Los korats no son tan vocales como sus camaradas siameses; tienen otras maneras de expresar sus deseos.

A la hora de la cena ellos se enredaran alrededor de tus tobillos, subirán a tu hombro, y quizá hasta te den un golpecito si no te apuras con su comida, pero si hay algo importante que decirse, ellos lo dirán.

Problemas de salud conocidos: la GM1 y la GM2 son unas raras enfermedades neuromusculares que en ocasiones afectan a los korat.