Un líquido cuántico es un tipo especial de fluido que únicamente puede existir en condiciones de presión muy elevadas o temperaturas muy bajas, próximas al cero absoluto.
A temperaturas tan bajas, las propiedades térmicas, eléctricas y magnéticas de muchas sustancias experimentan grandes cambios y presentan comportamientos muy diferentes de los que poseen a temperaturas ordinarias.
El físico húngaro L. C. Tisza, en 1938 dio una explicación de la superfluidez basándose en las teorías cuánticas.
Las estrellas de neutrones están formadas por dos partes diferenciadas: el núcleo y la corteza.
En el núcleo la densidad es muy alta, por lo cual los neutrones que la forman se convierten en un material homogéneo con las características de un líquido cuántico.