La bestia del corazón

[1]​ En un ambiente obscuro y lleno de represión, se desarrolla unas historia de cuatro jóvenes, los cuales son asediados por el gobierno, personificado por el capitán Pjele y su perro del mismo nombre, debido a sus ideas de cambio y disconformidad con el dictador Nicolae Ceauşescu.

Tuvieron que buscar sitios seguros donde almacenar los documentos, así como desarrollar claves en las cartas que se enviaban para dilucidar si eran leídas antes de llegar a su destino.

Poco a poco el gobierno presionaba más a la gente, ésta optaba por suicidarse o simplemente desaparecer; en el mejor de los casos lograba emigrar de forma ilegal.

Al final del libro se comenta "Cuando callamos, nos tornamos desagradables, dijo Edgar.

Cuando hablamos, nos tornamos ridículos", reflejando claramente la tendencia opresora que se vivía y la desorganización civil.