La casa del lago, cuyo título original en inglés es The Lake House, es un drama romántico estadounidense filmado en el estado de Illinois.
La cinta recibió comentarios mixtos por parte de la prensa cinematográfica, afirmando que el argumento era demasiado complicado.
Kate Forster abandona la casa que ha estado alquilando junto al lago para trasladarse a Chicago.
Al leerla Alex se sorprende, ya que la casa está abandonada y no hay huellas de perro en la entrada.
[7] La filmación se llevó a cabo en numerosas localidades del estado de Illinois, como Aurora, Oak Park, Riverside, McHenry y en la ciudad de Chicago, en localizaciones como Richard J. Daely Memorial Plaza o en la Brodway Avenue.
[8] Los actores únicamente coincidieron dos semanas durante el rodaje ya que comparten pocas escenas juntos.
[6] El director argentino hace un cameo en la película apareciendo sentado junto a Sandra Bullock en un tren y usando un spray bucal.
[5] El perro que aparece en la película se llama Jack, a pesar de ser una hembra tal y como se menciona en el filme, como homenaje al personaje interpretado por Keanu Reeves en Speed, Jack Traven.
[11] La casa que da título a la cinta fue construida expresamente para el rodaje en Maple Lake, Illinois.
[6] La construcción se asentaba sobre unas vigas de metal situadas aproximadamente tres metros sobre el agua.
[6] Sandra Bullock reveló en una entrevista concedida a Entertainment Weekly que la casa tenía agua corriente pero no aseos.
Durante su primer día en exhibición sumó $5 millones convirtiéndose en la cuarta opción más vista de la jornada.
[16] Es el primer título de la historia lanzado simultáneamente en los formatos DVD y Blu-ray.
[19] Roger Ebert escribió en el Chicago Sun-Times que «el filme funciona (...) En los viajes a través del tiempo me suelo distraer con los fallos de la lógica y sus contradicciones temporales (...) Aquí lo acepto como premisa, no me hago preguntas».
O. Scott del The New York Times describió la cinta como «un escaparate para sus estrellas, que parecen confortables en sus papeles y encantados de estar otra vez en mutua compañía en otra película profundamente simple, que entretiene sin esfuerzo».
[23] E. Rodríguez Marchante del Diario ABC la puntuó con tres estrellas describiéndola como «una película de incontenida tensión pasional (...) el hecho de que ese romance lo interpreten quienes lo interpretan sin duda lo banaliza, lo sitúa en zona vista o sabida».
[24] Francisco Marinero del diario El Mundo señaló que la cinta tenía «muy bonitas imágenes, con reparto adecuado, contado con serenidad (...) e inconsistencia insuperable».