Como se describe en una magazine,[1] Hermann, un oficial militar ruso con una fortuna limitada, queda fascinado cuando escucha la historia de la condesa Fedotovna, que ganó su fortuna jugando tres cartas particulares, cuya identidad se niega a revelar.
Se enfrenta a la condesa con un revólver y le exige saber las cartas que jugó.
A la mañana siguiente le parece ver el fantasma de la condesa, quien le dice que las tres cartas son el tres, el siete y el as.
La tercera noche apuesta todo su dinero, seguro de que la carta será el as.
Sin embargo, descubre que su propia carta se ha convertido en la reina de espadas y lo ha perdido todo.