La muda Hee-jin trabaja un resort de pesca, donde alquila pequeñas cabañas flotantes y transporta a sus clientes de un lado a otro.
Ella también se ocupa desapasionadamente de las necesidades de sus clientes vendiendo suministros, proporcionando prostitutas u ocasionalmente actuando como tal.
Sin embargo, un día llega al lago un ex-policía llamado Huyn Shik que acaba de matar a su amante y está dispuesto a suicidarse.
Hee-Jin lo impide y comienza a formarse un vínculo entre ellos.
También hay numerosas escenas que hacen referencia a la crueldad hacia los animales, que según el director Kim Ki-duk, eran todas reales.