[2] La obra fue rechazada por los espectadores al mostrar a un hombre con la nariz rota y con facciones pronunciadas, en esa época era considerado un rostro desagradable para el común de la gente.
La obra se realizó en bronce con pátina negra, café obscuro y verde con medidas de base 12.5 x 15.1 x 15.3 cm y en la base la firma Rodin.
Esta obra fue crucial en el desarrollo de la estética escultórica del autor.
Según palabras del propio Rodin: Esa máscara determinó todo mi trabajo futuro; es la primera pieza de modelado que hice.
Sus retratos posteriores poseen una singularidad en vida e individualismo, esto se debe en buena medida a que el artista permaneció fiel al principio del modelo de contornos.