Labros

En el antiguo pósito de Labros apareció un escudo que remite a leyendas sobre su origen en 1778.

El rey Carlos III hizo construir pósitos en los pueblos labradores de España, como Labros.

[1]​ El clima de la zona es mediterráneo continentalizado, con inviernos muy fríos con fuertes heladas y veranos templados.

En el siglo XIX se mencionan los «buenos montes poblados de encinas, roble, chaparro y otras leñas» existentes en el término.

[3]​ Hacia mediados del siglo XIX, el lugar, por entonces con ayuntamiento propio, tenía contabilizada una población de 120 habitantes.

Escudo encontrado en el pósito de Labros.