Estimuladas por la prolactina estas células acumulan una gran cantidad de proteínas y lípidos.
La prolactina provoca también la transformación de esta masa celular que adquiere una consistencia pastosa.
[2] Al igual que en los mamíferos, la "lactancia" en estas aves también es regulada por la prolactina.
[2] Al contrario que la verdadera leche, la leche de buche no contiene glúcidos y está compuesta en su totalidad por proteínas (60 % el peso seco) y lípidos (40 %).
[3] Los pichones se alimentan exclusivamente de esta sustancia durante los tres primeros días tras la eclosión.