El posterior desarrollo del Fuero General de Navarra, conviviendo con los fueros municipales y sobre el cual se realizan los Amejoramientos del Fuero, propicia el carácter pactista del régimen que permite la pervivencia de estas particularidades jurídicas cuando en 1512 Navarra se incorpora a la Corona de Castilla.
Cuando se emplea la fórmula tradicional de los «cinco sueldos febles o carlines por bienes muebles y una robada de tierra en montes comunes por inmuebles» se transmite el mensaje al heredero de que ha sido tenido presente aunque no se le haya dejado nada.
Por ello, al emplear esta fórmula hiperbólica se comunica realmente la ausencia de legado alguno.
Aquél, por ser descendiente directo del testador, debe recibir algo de sus bienes.
Pero no únicamente en el aspecto espiritual, sino en su pleno sentido material: sigue llevando el negociado familiar, o la explotación agrícola.