Ha dejado una obra poética (Oferenda aos Mortos) y epistolar considerable aún en gran parte inédita.
Adquiere una cultura enciclopédica y se adhiere a las ideas ilustradas.
Se enamoró del conde Carlos Augusto de Oeynhausen, que había ido a Portugal junto con su primo por orden del marqués de Pombal.
Este tuvo que renunciar al protestantismo y se casó con ella el 15 de febrero de 1779, siendo padrinos el rey Pedro III y la reina María I.
[1] Una vez allí logró gran estima de la emperatriz María Teresa I y de su sucesor José II.