Les Masies de Sant Miquel

En esta área se localizan tres yacimientos relevantes: El momento más antiguo corresponde a la necrópolis de Can Canyís que, por los estudios realizados, puede datarse alrededor de los siglos VI y V a. C. Este sector del yacimiento es el que ha sido estudiado más a fondo, a partir de sus materiales : Las estructuras puestas al descubierto durante la realización de obras en las fincas en diversas épocas y los trabajos de delimitación arqueológica llevados a cabo han puesto de manifiesto que se trata de un conjunto arqueológico de una extensión y calidad excepcional, tanto por el estado de conservación de las estructuras del poblado como por la riqueza y abundancia del material recuperado en la zona de la necrópolis.

Aparte del buen estado de conservación y de la gran extensión del área arqueológica, debe mencionarse su importancia científica.

A pesar de que una pequeña parte de la necrópolis fue destruida en los años sesenta, el material recuperado nos muestra que nos encontramos ante una de las necrópolis ibéricas más importantes del país, junto con las de Ullastret o las del Bajo Ebro.

Su importancia aumenta con el hecho de que se puede relacionar directamente con una zona de hábitat, lo que es muy infrecuente en el mundo ibérico, considerando que pocas necrópolis pueden asociarse directamente con un poblado localizado.

Esta asociación directa con un asentamiento que ocupa una gran superficie (unos 70.000 metros cuadrados) y tiene una vida muy larga (siglos V a II a. C.) hace evidente la existencia de más tumbas, considerando que las localizadas en el año 1960 corresponden a un segmento muy pequeño de la población que habría ocupado el asentamiento.