[1] Deben su nombre al hecho de haber sido formuladas en 1857 por el químico y meteorólogo holandés C.H.D.
Por otra parte, en el hemisferio Norte, el viento gira en torno a las altas presiones en el sentido de las agujas de un reloj, mientras que el viento de las bajas presiones gira inversamente (en el hemisferio Sur ocurre lo contrario).
Por ejemplo, no son aplicables en zonas cercanas al ecuador.
Tampoco tiene vigencia la ley de Buys-Ballot en el caso de los vientos térmicos, como la brisa de mar, el terral, catabáticos y anabáticos, el Föhn, el Chinook, el Zonda y las ráfagas emitidas por nubes tormentosas como los cumulonimbos.
Todos ellos se originan en mecanismos térmicos completamente al margen del sistema meteorológico general de la circulación a escala sinóptica de la atmósfera.