Las ramillas jóvenes verdes o rojizas, pero siempre cubiertas en mayor o menor medida de granitos blancos (depósitos de carbonatos), lo que les da un aspecto blanquecino-ceniciento.
Cáliz tubular, no anguloso, de unos 9 mm, con 5 dientes agudos muy cortos, rojizo.
El fruto es diminuto, largamente oval, membranoso, situado en el interior del cáliz persistente.
[1] Todo tipo de suelos rocosos, arenosos o limosos-húmedos y ricos en sales.
Suele aparecer en torno a lagunas interiores de agua salada y en las proximidades del mar.