Lobo e Cão es una película de dramática portuguesa dirigida por Cláudia Varejão.
[3] Para Ana el océano es la frontera palpable de un mundo que le está quedando chico.
Signada por las tradiciones y la religión, la vida en la pequeña isla portuguesa de São Miguel dicta con claridad qué lugares les corresponden a hombres y mujeres.
Pero ser adolescente es aventurarse a expandir los límites: junto a su amigo Luis, quien lleva sus brillos con orgullo, y movilizada por la visita de una amiga que llega del extranjero, Ana descubre otro mundo posible en el que el género no es una prisión sino una elección y donde puede existir algo parecido a la libertad.
Claudia Varejão aborda su primer largometraje de ficción con las herramientas adquiridas en sus documentales y, de la mano de un extraordinario grupo de actores no profesionales que les prestan a los personajes el cuerpo y la experiencia, construye una coming of age que es, al mismo tiempo, el retrato sensible de una comunidad.