Bueno a lo que íbamos, este pequeño paraíso que hace frontera con la rival Aldea de la Navahermosa y digo eso porque son beatos, aunque en estas zonas se compartan muchas buenas amistades.
Es un terreno con grandes ondulaciones y está a unos 300-400 metros de altitud sobre el nivel del mar.
En cuanto a la fauna, antiguamente había meloncillos, hurones, gatos monteses, zorros, posiblemente linces e incluso lobos.
Sin embargo, con la superpoblación, el aumento de luces, ruidos, motos y vehículos que transitan con cada vez mayor frecuencia sus carriles, la variedad y, especialmente, la cantidad, se ven en franco retroceso.
Ahora abundan más los perros callejeros y gatos asilvestrados abandonados tras ser domésticos.