[2] Fue el mismo Gaudí quién definió con cera el diseño de la pieza, con lo que el autor demostró su destreza en el ámbito escultórico.
Gaudí soluciona así con el diseño un procedimiento complejo y de gran producción con una sola pieza.
Gaudí le quiso dar relieve para que fuera la luz y las sombras quienes aportaran dinamismo al pavimento.
[3] Así, se necesitan siete baldosas juntas para poder contemplar en su totalidad los tres componentes que conforman el conjunto.
Se mantiene más presente todavía la temática marina que genera diferentes profundidades y percepciones.
El dibujo fiel al original muestra las figuras en bajorrelieve, la estrella de mar, la caracola y las algas, que evocan la sinuosidad del movimiento marino.