Hoy en día Loung Ung está casada y vive en Shaker Heights, un suburbio de Cleveland, Ohio.
Su madre había nacido en China y se mudó a Camboya cuando sólo era una niña.
Pronto se trasladaron, con sus hijos, a un apartamento en el centro de la capital, Nom Pen.
La familia disfrutó así de una vida lo suficientemente acomodada para poseer dos coches, un camión, teléfono, varias sirvientas y agua corriente.
Allí se hacinaban miles de refugiados que esperaban su oportunidad para ir a otro país.
En septiembre, Loung, de diez años, comenzó su educación en los Estados Unidos en tercer grado.
En los últimos años del embarazo de Eang, Meng abandonó sus estudios en un colegio cercano y comenzó a trabajar en dos empleos.
Durante sus seis años en Estados Unidos, Loung había tenido que hacer frente a diversos episodios de tristeza y soledad.
Durante estos años, tomó la firme decisión de convertirse en una activista, y conoció a su futuro marido.
En 1993, Loung se licenció en el Saint Michael’s College, y encontró trabajo como educadora social en un centro de acogía para mujeres maltratadas, en Lewinston, Maine.
En 1995, Ung viajó de nuevo a Camboya por primera vez desde que hubiera huido quince años antes.
En ambas memorias, Loung Ung escribe en primera persona y, durante la mayor parte, en presente, describiendo las circunstancias como si se estuviesen desarrollando ante los ojos de los lectores.