Su trabajo la llevó a descubrir un factor nutricional que sirvió para prevenir y curar esos desórdenes.
[1][2][3] Las mujeres en Inglaterra recién tuvieron la posibilidad de convertirse en profesionales hacia los años XIX.
Lucy Wills perteneció a una generación que se benefició de las reformas victorianas, y tres de los establecimientos a los que concurrió surgieron en consecuencia.
Asistió al Cheltenham Ladies' College, un internado británico pionero en formación de mujeres para ciencias y matemáticas.
Tras comprobarlo descubrió, previa práctica en monos y ratones, descubrió que el ácido fólico de la levadura llevaba a la mejoría, que contenían, por ejemplo, la crema para untar británica Marmite.