Vivió la mayor parte de su vida en Francia, tras establecerse allí con su marido, Álvaro Guevara.
A los 19 años comenzó sus estudios en la Slade School of Fine Art de Londres y estudió con Henry Tonks.
Tras el nacimiento de su hija Alladine Guevara en 1931 se separaron y ella se trasladó a residir en el sur de Francia, en Aix-en-Provence junto al pintor Martin Roch.
[2] En esta época mantuvo una intensa actividad artística creando una imaginería personal que puede encuadrarse dentro del realismo mágico.
[2] Su primera exposición individual en Nueva York celebrada en 1939 en Valentine Gallery le dio una notoriedad que hizo que Peggy Guggenheim la invitara a participar en The Exhibition by 31 Women.