Los temas compuestos por el Conjunto 9 -que la palabra 'conjunto' era propio del rock en ese momento, algo que probablemente era buscado- compartían esas características, mientras que las incorporaciones clásicas como «Adiós Nonino», fueron arregladas para tal efecto.
Aunque el sonido del grupo está entre los mejores logrados por Piazzolla, como en caso de los pasajes en «Tristezas de un doble A», lo cierto es que Piazzolla no cambio su escritura ni instrumentos, las cuerdas, salvo el violín y algún tema ocasional asignado al violoncelo, funcionan en bloque.
[4] En ocasiones especiales volvería a armar su Quinteto, pero marcaría la primera vez que Piazzolla usó músicos diferentes para grabar y tocar en vivo, ya que en la búsqueda de estar al día comenzó a buscar nuevos sesionistas para grabar en el estudio.
En 1977 se reditó en Italia por el sello Eleven como Buenos Aires ora Zero.
[7] En la crítica de la edición crítica del álbum del sitio web AllMusic escrita por James Manheim argumenta que el álbum difiere en su espíritu con respecto al volumen anterior, remarcando que: "aquí Piazzolla, sin renunciar a las muchas posibilidades del noneto, retrocede en la dirección de los ritmos del tango", termina concluyendo con que: "la música de este álbum, en cierto modo, desciende de las densas, evocadoras y a menudo divertidas danzas del Alto Barroco francés.