[2] Posteriormente cantó en muchos estrenos y reposiciones, esperando pacientemente para reemplazar a Arnould después de su jubilación.
Anacréon, su primera ópera, no fue aceptada y solo recibió una actuación privada en la residencia Brunoy del conde de Provenza en 1781.
[9] Esta es la única obra suya cuya música que ha sobrevivido.
[10] Ese mismo año, el 8 de diciembre, su oratorio Les Israélites poursuivis par Pharaon —el único oratorio conocido del siglo por una mujer francesa— fue presentado en el Concierto Spirituel[11] En 1792, su ópera cómica en dos actos, Plaire, c'est commander fue montada en el Théâtre Montansier de París, tras haber sido previamente rechazada por el Théâtre Feydeau junto con otra también montada por Beaumesnil.
No obstante, resultó ser un éxito bastante bueno, con veintiún funciones y fue la quinta obra más representada del año en el Théâtre Montansier.