Sin embargo, el autor rechazó el premio en protesta porque era otorgado a varios escritores al mismo tiempo.
[1] Aunque había escrito ya dos novelas, su obra comenzó a valorarse hasta que escribió Un redoble muy largo (1974) —publicado por la editorial Joaquín Mortiz, que lo convirtió en ganador del Premio Xavier Villaurrutia.
[3][4] Según él, había dejado de ser «un reconocimiento para convertirse en un sistema de concesiones colectivas».
[5] Echeverría ha colaborado con artículos y cuentos para diferentes medios impresos como Cuadernos de Bellas Artes, Cuadernos del Viento , Estaciones, «El Gallo Ilustrado» —suplemento de El Día— y «El Heraldo Cultural» —suplemento de El Heraldo de México—.
[5][6] Vive alejado de los medios, no le gusta dar entrevistas y tampoco hacer presentaciones de sus libros.