Su padre era farero por lo que vivió en diversas localidades durante su infancia y adolescencia.
Comenzó a interesarse por la fotografía como aficionado y Juan Castuera fue su primer maestro.
[2] Con 27 años abrió un estudio fotográfico en Betanzos, tres años después se dedicó a la fotografía de retrato en Ferrol y en 1955 se instaló en La Coruña, en estas ciudades estuvo participando en las actividades de sus respectivas agrupaciones fotográficas.
[2] Sin embargo, el reportaje que le dio la mayor relevancia fue el encargado por el Instituto Español de Emigración en 1957 sobre las despedidas entre los emigrantes y sus familias en el puerto de La Coruña cuando embarcaban con destino a Argentina.
En 1965 entró a formar parte de la plantilla del NO-DO por lo que compatibilizó la fotografía con el cine.