[2] Al respecto, un autor señaló: “El señor Rodríguez se hallaba dotado de un carácter muy suave; pero carecía de la preparación necesaria para dirigir un establecimiento como el Instituto”.
[3] Este cargo lo ocupaba conjuntamente con el puesto de rector del Seminario santiaguino[4] En 1823 fue elegido diputado suplente por Santiago en el Congreso Constituyente pero no fue llamado a incorporarse.
Integró también la Comisión Permanente para el receso de 1832 a 1833 .
En el campo eclesiástico en 1824 y 1841 se le nombró examinador sinodal.
En el cabildo catedralicio fue ascendiendo hasta ser nombrado deán en 1853 .