Fue la tercera hija del matrimonio formado por Leopoldo II, gran duque de Toscana y la princesa María Ana de Sajonia.
[2] El matrimonio de sus padres tenía ya otras dos hijas, Carolina Augusta, nacida en 1822 y Augusta Fernanda, en 1825.
Queda huérfana de madre en 1832.
[2] Murió en el palacio Pitti con 7 años, siendo atendida en sus últimos momentos por su tía materna, María Fernanda de Sajonia, viuda, además de su abuelo paterno, Fernando III.
[6] En 1841 murió su hermana Carolina Augusta; por lo que la única de sus hermanas que viviría hasta la madurez sería Augusta Fernanda, casada en 1844 con el príncipe Leopoldo de Baviera, después regente de Baviera.