En el otoño de 1937 intercepta el carguero griego Victoria, que con 6.600 trb fue el mayor buque civil apresado en toda la contienda.
Por el fracaso en el desembarco fue destituido el capitán de la nave, siendo reemplazado por Serafín Santa María.
Cuando la ley entró en vigor dos días después, el 8 de enero, el Mar Cantábrico ya había zarpado.
Para algunos autores el desciframiento por los servicios criptoanalíticos franquistas tuvo un papel decisivo en la captura del buque.
Un par ("Victoria" y "Bocho") tienen que ver con la captura del "Mar Cantábrico".
Para ponerlo más difícil la motonave cambia su nombre por el británico de Adda matriculado en New Castle, emplea lonas embreadas para alterar su perfil y cambia colores.
[16] En 1939 el Segundo Gobierno de Francisco Franco devuelve el buque a sus propietarios y tras deshacer las reformas que lo habían convertido en una unidad de la armada retornó en 1940 a la actividad comercial.
En 1967 la naviera vende a su hermano, Mar Negro a una sociedad mancomunada por las empresas montañesas Naviera Castilla y Transportes de Petróleos, permaneciendo en la matrícula de Bilbao como Río Pisueña.
En 1971 fue adquirido por el armador mexicano Navimex y con el nombre de Río Frío cubre su última etapa, siendo desguazado en Kaohsiung el año 1973.