Entre sus compañeros estuvieron su inseparable primo, Ramón Rosa Soto , Ricardo Casanova y Estrada -futuro arzobispo de Guatemala.
Muy joven empezó a llamar la atención por sus artículos literarios y políticos, inspirados estos últimos en los principios proclamados por la revolución de 1871, la cual apoyó.
Tras la elección del general Miguel García Granados en un plebiscito que se convocó para el efecto, fue llamado a servir como subsecretario de Gobernación, Justicia y Negocios Eclesiásticos.
En contraste, su antiguo socio en la «Rosario Mining Company», Valentine, se convirtió en el concesionario del ferrocarril interoceánico de 1890 y sería conocido como el «Rey de Honduras» a principios del siglo xx.
Barrios y del Valle se comprometieron a poner mil hombres para dicha causa, pero los hechos políticos se precipitaron en contra de Valle, debido a la desconfianza de Barrios Guatemala por la permanencia en el Gobierno del mariscal González, que fungía como vicepresidente luego de haber sido presidente antes que Valle.
Su ideólogo y Ministro General fue Ramón Rosa, con quien emprenderían una ardua labor de transformar a la nación hondureña siguiendo los preceptos liberales que ya habían utilizado en Guatemala.
[3] Aún con el laicismo constitucional imperante en Honduras, Soto, comicionó en 1878 al padre Antonio R. Vallejo para que realizará un trabajo educativo para la nación, Vallejo escribió el Compendio de la historia social y política de Honduras.
Durante su administración y con la asistencia de su primo Ramón Rosa, Soto puso en marcha las reformas liberales.
Estas reformas de tipo administrativo, político, económico y social, intentaron darle un giro a la situación que vivía Honduras.
A pesar de los avances logrados durante la administración Soto, Honduras volvió a caer de nuevo en la inestabilidad social, al no contar con productos -como el café en Guatemala- en qué forzar una economía estable.
[22] El expresidente salió al exilio primero en San Francisco, California, Estados Unidos y luego hacia Europa, ubicándose en la ciudad de París, Francia.[3].
Soto llegó a Honduras, proveniente de París, ciudad donde residía y presentó su candidatura para las Elecciones generales de Honduras de 1902, Soto formó su movimiento político el «Club Unión Patriótica» asimismo su director de campaña fue su amigo Rómulo Ernesto Durón quien también fue director del órgano publicitario "Sotista" La Paz;[23] en su formula iba como vicepresidente Rafael Alvarado Manzano, ambos se batirían contra el general Manuel Bonilla candidato oficial del «Partido La Democracia»,[Nota 6] que obtuvo 28,550 votos (48.7%) proclamándose ganador.
Los otros resultados fueron: el doctor Juan Ángel Arias Boquín del «Partido Liberal de Honduras» obtuvo 25,118 votos (42,9%); y Marco Aurelio Soto del Partido «Club Unión Patriótica» que obtuvo 4,857 votos (8.3%)[24] Marco Aurelio Soto Martínez falleció en París, Francia el 25 de febrero de 1908.
En contraste, su antiguo socio en la «Rosario Mining Company», Valentine, se convirtió en el concesionario del ferrocarril interoceánico de 1890 y sería conocido como el «Rey de Honduras» a principios del siglo xx.