Masacre de Gachetá

Los hechos tuvieron lugar durante el gobierno de Eduardo Santos (1938-1942), miembro del Partido Liberal Colombiano.

[1]​ Aunque éste fue un hecho de orden público y no político, resultó siendo aprovechado por el Partido Conservador que desató un escándalo en el periódico El Siglo, afirmando que todo este hecho lo había ordenado el gobierno del presidente Santos.

[4]​ Al enterarse de lo ocurrido, Laureano Gómez regresó a Bogotá desde su finca de Útica (Cundinamarca) y acusó al gobierno del presidente Eduardo Santos haber apoyado a las «turbas izquierdistas».

[3]​ Sin embargo, no era la primera vez que Gómez se declaraba en pie de guerra.

[4]​ El gobierno nombró como investigador a Enrique Vargas Orjuela (célebre por el Caso Mamatoco), quien escribió al presidente Santos reconociendo que el gobierno no tuvo participación en dicho acto y que prestó las facilidades necesarias para el desarrollo de la investigación.

Aquilino Villegas en una caricatura de Ricardo Rendón .