El mayor de sus secuestros masivos fue en una escuela secundaria en Aboke, Distrito Apac, Región Norte.
Los atacantes prendieron fuego a los colchones de los estudiantes y, según informes, provocaron explosiones en las inmediaciones.
[4] Los atacantes también confrontaron a la esposa del director de la escuela en su casa del recinto, pero como estaba amamantando, la dejaron escapar con sus hijos antes de prender fuego a la casa,[9] el cual según la policía, los fallecidos tenían entre 12 y 95 años.
La policía de Uganda ha identificado a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) como responsables del ataque.
Además, el Ejército de Uganda ha movilizado aviones para ayudar a localizar al grupo rebelde.
Los estudiantes heridos recibieron 2 millones de chelines para ayudar a cubrir sus facturas médicas.