Metafísica de la presencia

La interpretación deconstructiva sostiene que toda la historia de la filosofía occidental con su lenguaje y tradiciones ha enfatizado el deseo de acceso inmediato al significado y, por tanto, se ha construido una metafísica u ontoteología basada en la noción de presencia, privilegiada sobre la ausencia (en cuanto no-existencia).

En la obra más importante del filósofo alemán Martin Heidegger, Ser y tiempo (Sein und Zeit, 1927) se argumenta que el concepto de tiempo que prevalece en todo el pensamiento occidental se ha mantenido prácticamente sin cambios desde la definición ofrecida por Aristóteles en su Física.

La metafísica de la presencia ha sido muy cuestionada por los pensadores deconstructivistas, como Jacques Derrida o Joan Scott, que describen su tarea como el cuestionamiento o la "deconstrucción" de esta tendencia metafísica en la filosofía occidental.

Este argumento se basa en gran medida en el trabajo anterior de Heidegger, quien en Ser y Tiempo afirmaba que la actitud teórica de la presencia pura es parasitaria sobre una participación más originaria con el mundo, en conceptos tales como el "estar listo" y "ser con".

En su breve trabajo Intuition of the Instant, Gaston Bachelard, en un intento de ir más allá, o paralelamente, al concepto occidental de 'tiempo como duración', es decir, el concepto occidental del tiempo como espacio de movimiento de trayectoria imaginada distingue entre dos fundamentos del tiempo: el tiempo visto como una duración y el tiempo visto como un instante.