Microbiocenosis

Participando en procesos de algunos ciclos biogeoquímicos, descomponiendo la materia orgánica y entablando relaciones simbióticas.

[1]​ Las distintas sustancias químicas que constituyen a los seres vivos se hayan en constante movimiento.

Para empezar con este ciclo, se requiere la conversión del carbono inorgánico (CO2) en compuestos orgánicos (carbohidratos).

[2]​[3]​ El nitrógeno orgánico se puede encontrar en desechos o restos de animales, y plantas.

Durante el proceso de amonificación, los aminoácidos y ácidos nucleicos (compuestos orgánicos nitrogenados) son degradados a amoníaco.

Luego son transformados en nitrito y nitrato, en el proceso de nitrificación realizado por bacterias como las nitrosomonas.

Por un lado, las leguminosas desarrollan nódulos radiculares, donde las rizobio pueden vivir, y obtener carbohidratos producidos en la fotosíntesis del vegetal.

Siendo los parásitos los que viven a expensas del organismo hospedador, debilitándolo y haciéndolo vulnerable ante depredadores.

[6]​ En términos generales, un ecosistema está formado por dos tipos de componentes, los bióticos y abióticos.

Lo referente a componentes bióticos, son los seres vivos que se encuentran en ese lugar.

El medio está compuesto únicamente por la sustancia presente en el entorno del ecosistema (agua o aire).

Mientras que los factores ambientales (abióticos) están comprendidos por la presión atmosférica, humedad, la salinidad, la luminosidad, la temperatura, etc.[8]​

Protozoa_collage_2
Algunos microorganismos que conforman la Microbiocenosis.
Raíces de una planta con nódulos radiculares.
Nódulos radiculares formados por la relación simbiótica.
Micrografía electrónica de un glóbulo rojo infectado con Plasmodium falciparum.
Glóbulo rojo infectado con Plasmodium falciparum entre otras células sanguíneas sanas.