[2] Algunos insectos migran en forma predecible, mientras otros lo hacen solo a veces, según las condiciones ambientales u otras variables.
Migración que incluye movimientos progresivos alejándose del área habitual de residencia, sin ir a una localidad específica.
Hay insectos que emigran a mayores altitudes, en vez de latitudes para aprovechar recursos efímeros.
[3] Generalmente las migraciones se caracterizan por tener un destino bien determinado, lo cual requiere navegación y orientación.
[6] La mayoría de los insectos perciben la luz polarizada y pueden usar este sentido cuando el sol no está ocultado por las nubes.
[9] En un experimento en la mariposa monarca se comprobó que un imán podía alterar la dirección de su vuelo inicial.
[12] [13] Las langostas o saltamontes a veces forman bandadas que efectúan largos vuelos.
Sin embargo la langosta del desierto (Schistocerca gregaria) tiene vuelos estacionales en partes de África;[1] en casos excepcionales recorre grandes distancias, como en 1998 cuando inmensas bandadas cruzaron el océano Atlántico.
Muchas especies de Anax, Libellula, Sympetrum y Pantala son bien conocidos por sus migraciones masivas.
[1] Se cree que Pantala flavescens realiza las migraciones oceánicas más largas entre los insectos.
[27] Las mariquitas o coccinélidos, como Hippodamia convergens, Adalia bipunctata y Coccinella septempunctata se congregan en grandes números en ciertos lugares.
[37] Las poblaciones de langostas están siendo constantemente observadas ya que las plagas pueden ser devastadoras.