[1][2] El propósito era la evangelización de los indígenas Ais (Caddo) así como asegurar la soberanía española del territorio frente a la amenaza anexionista desde la Luisiana francesa.
[3][4][5] Su segunda fundación en 1721 se produjo en la misma época que el establecimiento del presidio Nuestra Señora del Pilar de los Adaes cuya guarnición reafirmaba la frontera este de la Texas española.
Los Ais resultaron advenedizos y sin interés en el abandono de sus supersticiones.
El sitio de la misión Dolores, denominado Mission Hill, ha permanecido en una propiedad privada desde entonces y su entorno fue moderadamente urbanizado.
A lo largo del siglo XX se han realizado trabajos para la puesta en valor de este patrimonio histórico, con un museo y rutas senderistas.