Es la segunda y última de las misiones bajacalifornianas situadas en terreno montañoso.
Además, se cultivaban trigo, maíz, cebada y legumbres, aunque los rendimientos eran inconsistentes.
La misión también albergaba una cantidad considerable de ganado que incluía vacas, caballos, mulas y ovejas.
Santa Catarina fue destruida en 1840 durante un ataque en el que murieron dieciséis neófitos.
La misión, aunque en ruinas, sigue siendo un sitio de interés histórico y cultural.