Modesto Laza Palacios

Se trasladó a Málaga al quedar huérfano para vivir con su tío, Enrique Laza Herrera, farmacéutico, investigador y miembro de la Sociedad Malagueña de Ciencias.

Contribuyó además con numerosas artículos de prensa y diversas gestiones ante el secretario del Consejo Superior de Investigaciones Científicas a la defensa del Jardín Botánico La Concepción frente a la invasión urbanística.

[4]​ Entre sus obras sobre botánica, probablemente la más importante fue Algunas observaciones geobotánicas en la Serranía de Ronda, publicada en 1936.

Su obra literaria más conocida es El laboratorio de La Celestina, publicada en 1955, en la que analiza los términos mencionados en La Celestina referentes a plantas empleadas para la preparación de pócimas y ungüentos mágicos.

[1]​[3]​ En el Parque de Málaga hay una glorieta peatonal con su nombre.

Placa conmemorativa dedicada a Modesto Laza en la calle Molina Lario .
Glorieta de Don Modesto Laza en el Parque de Málaga .