Como la gran multitud excedía por una persona la máxima capacidad legal, el jefe Wiggum decide expulsar a Moe de la ceremonia.
Lisa le informa a Homer cuándo se mueve el tránsito, pero este acelera demasiado y pisa los frenos de repente.
Cuando, más tarde, se celebra el cumpleaños de la niña, Moe trata a la bebé como si fuera su propia hija.
Una noche, cuando toda la familia está durmiendo, Maggie se despierta al oír a Fat Tony y sus esbirros hablando en el patio de la casa.
Cuando uno de los mafiosos se deprime, Tony lo anima poniéndose una naranja en la boca, al igual que en El Padrino, y Maggie reconoce el gesto.
Luego, se las arregla para salir de su casa y seguir a los mafiosos.
Moe no le quiere leer "Alicia en el país de las maravillas" a Maggie por parecerle demasiado pornográfico, ya que habla sobre un conejo blanco y chicas comiendo hongos.