En la cocina italiana suele ponerse junto con los comensales, para que aliñen al gusto ensaladas, carnes, etc.
El funcionamiento en todos los casos es similar, un eje central impulsado por una rosca superior, transmite un giro a un desmenuzador con forma de rueda dentada.
El desmenuzador se va encontrando con los granos de las especias contenidas en el recipiente y las muele.
El empleo de este molinillo acompasa con el movimiento necesario para la buena distribución de las especias en los platos, por esta razón se aconseja su uso en la cocina.
Cuando se muele una especia ésta empieza a perder sabor y aroma, y es por esta razón el molinillo no sólo permite desmenuzar las especias, sino que cumple la misión de recipiente, protegiendo de la luz y del calor.