Monna Vanna (cuadro de Dante Gabriel Rossetti)

La obra fue adquirida tiempo después por Arthur Du Cros y Otto Beit, tras lo cual fue vendida en 1916 a la Tate Gallery a través de la National Art Collections Fund (NACF), formando parte en la actualidad de la colección del museo.

La modelo es mostrada con una piel delicada, pálida y luminosa (de acuerdo con el esteticismo predominante del momento) así como con una mirada penetrante, portando un abanico de plumas, el cual sería posteriormente mostrado en Veronica Veronese, y luciendo diferentes clases de joyas (un collar de coral rojo, anillos y pendientes), empleadas por el pintor con el fin de plasmar su técnica pictórica.

En palabras del propio Rossetti, la pintura era «probablemente lo más efectivo como decoración de una habitación que yo haya pintado».

Esta obra tuvo asimismo un profundo significado a nivel personal en el artista, principalmente por sus alusiones a la primavera, que se ve reflejada en el cuadro gracias al jarrón de flores situado en la parte superior derecha así como en los motivos florales del vestido de la modelo.

En 1873, Rossetti rebautizó la pintura de nuevo, esta vez con el nombre de Belcolore debido a que el pintor sentía que el anterior título no plasmaba la modernidad del tema mostrado en el cuadro, si bien dicho título no permaneció por mucho tiempo, siendo Monna Vanna el nombre aceptado actualmente.