Representa al abate jesuita Juan Ignacio Molina, uno de los principales científicos chilenos del siglo XIX.
El mismo año se designó al recientemente llegado Auguste François como su primer director.
[10][11] El monumento que se eleva sobre un pedestal de hormigón representa al abate Juan Ignacio Molina.
A su costado derecho se posa un cóndor sobre una base que emula un cúmulo de rocas, ambos elementos representando características naturales relevantes del territorio chileno.
[13] La figura se encuentra sobre una base plana y cuadrada que en el frente señala «FUNDIDA EN LA ESCUELA N. DE ARTES I OFICIOS Đ CHILE EN SANTIAGO POR JUAN E. SILVA EN 1861».