Los motores de tracción se usan en todo tipo vehículos desde las locomotoras eléctricas pasando por los coches eléctricos, así como en ascensores y cintas transportadoras.
Estos motores han sido tradicionalmente de corriente continua, funcionando con aproximadamente 600 V.
Existen dos tipos de motores:los asíncronos y los síncronos, que se usan solo ocasionalmente (Ej: TGV francés.)
Las ventajas que ofrece el uso de estos motores, es que ofrecen un alto par a bajas velocidades, además de la posibilidad de controlar sus principales magnitudes (posición y velocidad).
Hoy en día los motores asíncronos trifásicos se utilizan mucho gracias a su bajo mantenimiento y facilidad de fabricación comparado con otros tipos de máquinas eléctricas.