El proyecto del museo empezó a perfilarse hacia 1885 y cobró mayores bríos a partir de 1889, cuando la sede del Ayuntamiento quedó devastada por un incendio que destruyó buena parte de sus colecciones y archivos.
Pintor realista que había sido muy criticado en su juventud, Bonnat cimentó en su madurez una sólida posición como retratista de potentados europeos y norteamericanos.
Posteriores donaciones de otros benefactores en el siglo XX enriquecieron el museo aún más; no solo con viejos maestros, sino también ampliando el periodo representado hasta el impresionismo y los nabis.
Las obras, ralentizadas en parte por hallazgos arqueológicos, deberían concluir a finales de 2024 o poco después.
Los citados pintores españoles fueron admirados por Bonnat y le influyeron en su juventud, cuando desarrolló un estilo tenebrista lejos del academicismo predominante en París.