Nadezhda Lamánova

En 1885, a la edad de 24 años, abrió su propio taller.

Comenzó a ganar popularidad por su trabajo y buen gusto; viajaba a Francia frecuentemente, donde refinó su estilo y colaboró con Paul Poiret.

Lamánova creó vestidos para la emperatriz Alexandra Fiódorovna.

[cita requerida] Como la única diseñadora de renombre que se quedó en Rusia, sentó las bases de la nueva moda soviética, creando modelos con telas artesanales para el uso popular.

[1]​ En cooperación con la artista y escultora rusa Vera Mújina, Lamánova ganó el Gran Premio en la Exposición Internacional de 1925 en París.