En la porción cercana a la superficie terrestre, los materiales que se desintegran y los que se generan, a menudo son de nanoescala.
La mitigación de este proceso, denominado remediación del suelo, es una actividad difícil.
Una característica clave de las nanopartículas es que su estabilidad y su reactividad son tamaño-dependientes.
En general, la energía libre de las nanopartículas es inversamente proporcional a su tamaño.
Fenómenos bien identificados de las partículas tamaño-dependientes incluyen: Estas propiedades dependientes del tamaño resaltan la importancia del tamaño en la estabilidad y en la reactividad de las nanopartículas.