En la última década este problema se ha visto agudizado, siendo cada vez más claro que se necesita un sistema que sirva de organización y distribución de los datos y hallazgos entre la comunidad científica.
Una serie de recomendaciones fueron dictadas en 1991[2] El artículo permitió al NIMH crear el proyecto "Cerebro Humano" (HPB), el cual concedió la primera beca en 1993.
Gracias a ese informe del BIG, la SfN fundó el comité de neuroinformática.
La neuroinformática se crea mediante la fusión de otros campos: Varios cerebros animales han sido esquematizados y, al menos, parcialmente simulados.
[5] De todos modos todavía no se llega a comprender cómo las neuronas y sus conexiones generan un rango completo de comportamientos que se observan en un organismo relativamente simple como este.
Los modelos se depositarán en una base de datos en internet desde la cual el proyecto Blue Brain puede extraer y conectar los modelos de forma conjunta para reconstruir regiones cerebrales y así comenzar con la primera simulación completa del cerebro.